La URSS : el otro poder transnacional de la información
Tipo de material: ArtículoIdioma: Español Detalles de publicación: Caracas, Venezuela Herrero Hermanos Instituto de Estudios Asturianos en España Instituto de Cultura Hispánica Instituto de Estudios Superiores de Administración (IESA) Isaac León Frías José María Pérez Lozano McGraw-Hill Monte -vila Editores Órbita Organización Católica Internacional del Cine y Audiovisual - América Latina (OCIC-AL) Organización Católica Internacional del Cine y Audiovisual - América Latina (OCIC-AL) Organización Católica Internacional del Cine y Audiovisual - América Latina (OCIC-AL) 1985Descripción: 13Tema(s): Política | Periodismo | Información | Poder En: Estudios de comunicación social (1985)Resumen: En el mundo contemporáneo, dadas las actuales relaciones políticas, no es permitido hablar de un sólo poder transnacional, porque la manipulación del material informativo a través de la internacionalización del capital informativo es una forma de dominio entre países. Se usa la razón política, pura y simple, como dispositivo de poder en primer término, para promover la inducción de conductas políticas que luego generán el consentimiento de la acción económica, que a la larga revierte tantos beneficios al polo hegemónico, como a aquel poder trasnacional que se inicia con la acción económica. Tanto Estados Unidos como la Unión Soviética pretenden alcanzar, a mediano o largo plazo, beneficios económicos. Los procesos de información en los países que se autoproclaman como socialistas, transmiten a través de sus flujos de información materiales significativos parcelados, fragmentados, descontextualizados, y no toman en cuenta la respuesta, el feed-back, es decir la comunicación de retorno. Por tanto no hay en esencia comunicación, porque esta implica relación y participación democrática del receptor, del público, del pueblo. Bajo esta forma de difusión de información es difícil aumentar el nivel de conciencia del público receptor, pues impide un acercamiento a la dialéctica de la persona, a su participación activa en los problemas que le afectan.En el mundo contemporáneo, dadas las actuales relaciones políticas, no es permitido hablar de un sólo poder transnacional, porque la manipulación del material informativo a través de la internacionalización del capital informativo es una forma de dominio entre países. Se usa la razón política, pura y simple, como dispositivo de poder en primer término, para promover la inducción de conductas políticas que luego generán el consentimiento de la acción económica, que a la larga revierte tantos beneficios al polo hegemónico, como a aquel poder trasnacional que se inicia con la acción económica. Tanto Estados Unidos como la Unión Soviética pretenden alcanzar, a mediano o largo plazo, beneficios económicos. Los procesos de información en los países que se autoproclaman como socialistas, transmiten a través de sus flujos de información materiales significativos parcelados, fragmentados, descontextualizados, y no toman en cuenta la respuesta, el feed-back, es decir la comunicación de retorno. Por tanto no hay en esencia comunicación, porque esta implica relación y participación democrática del receptor, del público, del pueblo. Bajo esta forma de difusión de información es difícil aumentar el nivel de conciencia del público receptor, pues impide un acercamiento a la dialéctica de la persona, a su participación activa en los problemas que le afectan.
No hay comentarios en este titulo.